1- Edúcate en diabetes. Infórmate y aprende sobre diabetes, investiga, lee, pregunta, ponte en contacto con los especialistas: médico endocrinólogo, educador en diabetes, nutriólogo, psicólogo, entrenador, etc.
2- Preocúpate por tu estilo de vida. Mejora tu alimentación, tus hábitos, haz conciencia.
4- Evita hipoglucemias. A la escuela, al trabajo o de paseo lleva contigo una fruta o algunas galletas o barrita de cereal, caramelos o jugo con azúcar que puedan rescatarte de alguna emergencia de hipoglucemia. Si saldrás de fiesta puedes llevar algo pequeño como caramelos o gomitas o pastillas con azúcar. Para evitar que tu sueño se vea interrumpido por una hipoglucemia nocturna, checa tu glucosa antes de acostarte a dormir.
3- Revisa tus niveles de glucosa estratégicamente. Revísala en ayuno para saber cómo estás iniciando el día. Chécate antes de cada comida y dos horas después de haber dado el primer bocado para saber qué efecto tuvo en ti lo que comiste. Si conoces tu diabetes y cómo reacciona tu cuerpo, realizas conteo de carbohidratos y sabes cuánta insulina aplicarte para contrarrestarlos, quizá te puedas ahorrar el chequeo postprandial y revisarte hasta antes de la siguiente comida.
5- Utiliza insulina al comer. Usar la insulina adecuadamente te permitirá llevar una dieta variada, rica, equilibrada y divertida sin temor a descontrolarte o subir de peso. Apóyate en tu nutriólogo para conocer tu requerimiento diario y llevar un control sobre tu alimentación.
6- Haz ejercicio. Los músculos activados consumen glucosa a lo largo del día y ayudan a que ésta no se acumule en exceso en la sangre. Además, te mantendrá en forma, motivará y ayudará a mantener un óptimo estado de ánimo.
7- Hidrátate. El agua y otras bebidas naturales sin azúcar y a base de agua apoyan en el control de la glucemia. Evitan la concentración de azúcar en la sangre, mantienen la buena función de los reflejos, dan saciedad y aportan nutrimentos.
8- Séindependiente tanto como puedas. Prepara tus propios alimentos, aplícate tu insulina, cumple con tus actividades diarias. Evita poner de pretexto a tu diabetes.
9- Ten confianza. Cuéntale a tus seres más cercanos tu condición, qué cuidados debes tener. Pierde la pena de aplicarte la insulina en público. Los demás deben entender que éste es tu estilo y condición de vida.
10- Mantén la calma y una actitud positiva. Toma las riendas en los periodos de estrés, enfermedades agudas o enojo. Respira profundamente, controla tus pensamientos y sentimientos teniendo una visión positiva.