En el proceso de madurez biológica y emocional de los adolescentes, ell@s comienzan a tomar decisiones importantes en el manejo de su condición, pero siguen necesitando el apoyo de sus padres. Al acercarse a la edad adulta, muchos jóvenes serán independientes en un gran porcentaje de sus decisiones.
Es recomendable iniciar conversaciones sobre sexualidad con nuestros hijos desde temprana edad (adaptando la conversación acorde a su edad).
La diabetes puede producir preocupación y estrés al joven, así como pensamientos negativos de rechazo (“¿quién me va a querer con esta enfermedad?”). Un adolescente se preocupa por su atractivo y apariencia, y a un adolescente con diabetes puede resultarle difícil aceptarse a sí mismo. Resultaría útil que pudiera expresar su frustración y dudas sin sentirse juzgado.
El inicio de la vida sexual es una decisión personal. Si los adolescentes con diabetes dan ese paso deben ser conscientes de que la actividad sexual requiere esfuerzo físico y puede modificar los niveles de glucosa en sangre, hacia arriba o abajo. Es aconsejable revisar los niveles de glucosa antes, durante y después de tener relaciones sexuales. Siempre tener disponible un jugo o glucosa (en tabletas o gel) en el caso de una hipoglucemia.
Referencia
Rotemberg E., Smaisik K., Crecimiento y desarrollo de niños y jóvenes con diabetes mellitus tipo 1, Odontoestomatología, Vol. XII, No. 16, Dic 2010
