Es bien sabido que nuestras emociones tienen un efecto poderoso sobre nuestra elección de alimentos y sobre los hábitos alimenticios. 

Se ha encontrado evidencia de que la influencia de las emociones sobre la conducta alimenticia es más fuerte en las personas con obesidad y en personas que llevan un plan de alimentación muy estricto.

La emoción, por sí sola, no es responsable de una excesiva ingesta de alimentos, es la forma en que la emoción es afrontada por la persona lo que puede provocar el sobrepeso.

Para controlar el sobrepeso y la obesidad se recomienda seguir una terapia que ayude a controlar mejor las emociones, una dieta sana y practicar ejercicio regularmente.

Existe una relación entre los alimentos (y su aporte calórico) y las emociones, esto debería ser medible para comprender mejor cómo utilizar los alimentos en determinados estados de ánimo y cómo las emociones afectan la eficacia de los programas de pérdida de peso.

¿Quieres saber qué tipo de comedor eres? A continuación, te compartiré un cuestionario que podría ayudarte a saberlo, es de sólo 10 preguntas (ítems) y se llama Cuestionario de Comedor Emocional (CCE); clasifica a las personas en función de la relación entre la ingesta de alimentos y las emociones: http://www.garaulet.com/cuestionario-emocional/

Solamente conociendo los factores emocionales podremos reforzar los hábitos saludables que nos permitan mantener un peso corporal saludable. ¡Trabaja en equipo, consulta a tu psicólogo, nutriólogo y educador en diabetes!