¿Te ha sucedido que, mientras estás en la oficina, miras a través de la ventana, suspiras y piensas: “necesito vacaciones”?
Sería justo reconsiderar las razones por las que deberías tomar unos días de descanso, por ejemplo, sacar el estrés acumulado a causa de meses trabajo. Y es que unas merecidas vacaciones son el mejor antídoto para liberarte de todo cansancio.
Biológicamente, el estrés es verdaderamente dañino para la salud, te provoca migrañas, insomnio, desajustes estomacales, inclusive problemas vasculares y cardiacos. Afecta tu humor, traes un carácter que ni tú te aguantas, discutes con quien se te para enfrente, etcétera. Como verás, te afecta de manera física y mental.
Existen diversos estudios que descubrieron que dejar de tomar vacaciones por lo menos una vez al año, puede ser causa de infartos, depresión, irritabilidad, mal humor y otros malestares.
Los investigadores indican que no necesariamente las vacaciones deben ser largas y costosas, con salir de la ciudad y de la rutina un día, el cerebro logra recargar energía y mejorar la función intelectual propiciando un mejor desempeño laboral al terminar los días de asueto.
En Europa, el número de días de vacaciones es mayor al de México y esto se ve reflejado en la calidad de vida que tienen sus ciudadanos y es visiblemente mejor que la de los mexicanos.
Tomar vacaciones al menos una vez al año logra mantener buenas relaciones de amistad, con la pareja, la familia, en el trabajo y el entorno en general.
Considera algunas de las siguientes razones por las que te mereces unas buenas vacaciones:
1Las vacaciones permiten olvidar la rutina diaria, los problemas cotidianos y motivan a retomar fuerzas para organizar la vida con mayor objetividad.
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Las vacaciones son tan importantes que si una persona no descansa adecuadamente tiende a enfermarse con mayor frecuencia y sufre consecuencias como el desgaste de sus capacidades físicas y mentales.
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Existen grandes beneficios al tomar las vacaciones y se nota porque después de un periodo de descanso, las personas se tornan más creativas, productivas, y su capacidad física e intelectual es mayor.
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Las personas que toman vacaciones tienen menor riesgo de problemas cardiacos y posibilidad de muerte.
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Las personas que toman vacaciones frecuentemente son menos propensas a la depresión, tensión y cansancio.
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Las personas que toman vacaciones tienen menor riesgo de problemas cardiacos y posibilidad de muerte.
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Unas buenas vacaciones ayudan a revitalizar relaciones personales, de pareja, de familia, y laborales pues se produce un alivio de la tensión acumulada por las múltiples obligaciones o los problemas de oficina y personales.
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Al estar en un ambiente distinto, el cerebro es forzado a pensar diferente, encontrando así nuevas fuentes de inspiración y creatividad.
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Al reservar una semana de vacaciones al año, en promedio, te esforzarás para aprovechar al máximo este tiempo, siendo así más eficiente tu descanso.
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Considerando que el descanso es físico y mental, al regreso de tus vacaciones podrás ser más activo y productivo, y dar lo mejor de ti en tus áreas de trabajo y con todas las personas con las que te relaciones.
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Las vacaciones implican tiempo para planificarlas en conjunto con nuestros seres queridos; son espacios para volver a practicar la escucha, para volver a soñar, para disminuir al menos un poco las presiones; es indispensable hacer un alto, aclarar ideas y luego ponerlas en práctica, y esto sólo se logra en tiempo de reposo.
El tiempo libre permite soñar y proyectar los plazos de tiempo en los que se desea lograr ciertos objetivos y metas.
Éstas son razones de peso para tomar la buena decisión de irte de vacaciones. así que
¡A PREPARAR LAS MALETAS!
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