En mi experiencia profesional como nutrióloga me consultan pacientes que viven con sobrepeso u obesidad (comúnmente acuden después de una amplia peregrinación de muchos y diversos tratamientos); desafortunadamente la mayoría se trataron con “productos milagro” que prometieron resultados inmediatos con el mínimo esfuerzo, generalmente, son pastillas, licuados, masajes, cremas, por mencionar algunos ejemplos. El principal de los resultados al consumir dichos productos es un “rebote” (que ganaron el peso perdido más un extra) al dejar de consumirlos. Algunos pacientes lamentablemente afectaron su salud y finalmente contribuyó con una desmotivación y frustración al no haber alcanzado su objetivo.

Es importante destacar que ninguno de los pseudo tratamientos mencionados son aceptados por la Norma Mexicana de la Secretaria de Salud (NOM 008 SSA2017)(1), en el manejo de la obesidad, al no contar con bases científicas y al ser inseguros para la salud.

De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Salud 2018(2), 75.2% de la población mexicana adulta vive con sobrepeso u obesidad. La obesidad es una enfermedad crónica de origen multifactorial, por ello el tratamiento deberá ser igual de complejo y atendido al menos por tres profesionales de la salud (de preferencia tengan comunicación entre ellos). Dentro del grupo de tratamiento se sugiere que se consideren: médico endocrinólogo, nutriólogo y psicólogo (idealmente se recomienda que tengan especialidad en obesidad). Según las características de la persona, los especialistas guiarán al paciente a un tratamiento más específico y oportuno, brindándole herramientas de auto cuidado y educación en torno a mejorar y mantener hábitos saludables.

En la consulta el especialista evaluará “la construcción de la obesidad”, es decir, encontrará los factores que fueron detonando una ganancia excesiva de peso como componentes genéticos, edad, estilo de vida, el uso del algún tratamiento médico, situaciones emocionales (sociales, familiares o económicas) o incluso la interacción de todos estos factores mencionados.

El nutriólogo especialista en obesidad cuenta con las herramientas de diagnóstico y seguimiento nutrición adecuado. Durante el acompañamiento del tratamiento ayudará al paciente a desarrollar habilidades y capacidades para mejorar hábitos de alimentación, ejercicio, sueño, entre otros. Esto permitirá al paciente mantener una composición corporal sana y disminuir factores de riesgo, atendiendo así las consecuencias de esta enfermedad crónica.

Así es que si vives con obesidad o eres un familiar o amigo de una persona que vive con este tipo de condición, recuerda lo importante que es el tratamiento con los profesionales de salud. Sólo estos especialistas te ayudarán a encontrar la mejor solución para tu cambio de estilo de vida y lograr tus objetivos.

Los cambios de estilo de vida requieren de tiempo y en la mayoría de las ocasiones vienen acompañados de cambios emocionales, incluso la misma obesidad pudo haber sido consecuencia de dichos cambios. Por lo anterior es importante que el especialista considere si es conveniente el seguimiento de un psicólogo.